Resolución colaborativa de problemas (CPS: Collaborative Problem Solving): Modelo de manejo conductual en niños explosivos en inflexibles (Modelo de Ross Greene)
Dr. César Soutullo - Director, Unidad de Psiquiatría infantil y adolecente, Clínica Universidad de Navarra
Resumen de la ponencia
El modelo de Ross Greene (Psicólogo de la Universidad de Harvard) http://www.livesinthebalance.org/ para entender a los niños explosivos va más allá de los modelos clásicos de manejo conductual, que se basan en el castigo y la recompensa/motivación. Si queremos reducir un comportamiento negativo podemos asociarlo a un estímulo negativo (castigo o consecuencia negativa), o a la ausencia de un estímulo positivo (refuerzo negativo). Si queremos aumentar un comportamiento positivo lo debemos asociar a una recompensa, premio o elogio (refuerzo positivo, recompensa tangible o intangible). Esto funciona si el niño tiene control sobre sus acciones. Sin embargo, hay otros niños que tienen una predisposición a frustración fácil, debida a distintos motivos, puede ser por depresión, por ansiedad, por dificultades del lenguaje, por inflexibilidad cognitiva, por bajo cociente intelectual o por impulsividad cognitiva y afectiva (asociada frecuentemente al TDAH y Trastorno negativista desafiante (TND) o de la Conducta disocial (TC)). En estos niños no funcionará el premio-castigo, de hecho, el castigo les frustrará más, y empeorará su explosividad. También hay niños que reaccionan muy mal ante los cambios de rutina o les cuestan mucho las transiciones de actividades. Estos niños tienen lo que se llama un “Trastorno de las habilidades adaptativas”, y cualquier frustración, o situación que no vaya exactamente como ellos quieren que vaya, generará una respuesta afectiva muy intensa, una explosión afectiva.
Una parte fundamental del tratamiento del TND y del TC es el entrenamiento de los padres en técnicas de modificación de conducta y manejo conductual. El objetivo de este entrenamiento es fomentar los comportamientos positivos e ignorar, cuando se pueda, los comportamientos negativos. Algunas medidas importantes en las que se entrena a los padres son: dar órdenes y utilizar castigos más eficaces, establecer unos límites claros que no deben negociarse (pocos), y establecer otras reglas, menos importantes, sobre las que sí cabe una negociación. Estos son los programas clásicos de entrenamiento de padres en el manejo conductual, como el de Carolyn Webster-Stratton, The Incredible Years. http://incredibleyears.com/team-view/carolyn-webster-stratton/
El modelo de Greene da un paso más, para aquellos niños con dificultad en habilidades adaptativas, y subraya que es importante también aprender a detectar aquellas situaciones que pueden desencadenar explosiones desproporcionadas de agresividad en el niño o adolescente, con el fin de tratar de evitarlas. Es especialmente importante priorizar nuestras exigencias al niño. Para priorizar, Greene divide las situaciones en 3 tipos: A, B y C.
• Situaciones tipo A. Son situaciones que son importantes y potencialmente peligrosas si no obedece, como cruzar la calle sin mirar, meter los dedos en un enchufe. En estos casos los padres deben imponer su regla, aunque esto provoque una explosión en el chico.
• Situaciones tipo C. Hay situaciones que no son ni importantes ni peligrosas (ordenar el cuarto, terminarse la cena) que generan muchísima explosividad en el chico si intentamos imponer nuestro criterio. En estos casos es mejor dejar que el chaval se “salga con la suya”. No compensa discutir tan gravemente por esto, cuando hay otros problemas más graves pendientes de solucionar.
• Situaciones tipo B. Finalmente están las situaciones que no son ni importantes ni peligrosas pero que tampoco son menores, sobre las que los padres deben negociar con su hijo soluciones que satisfagan a todos.
Este tipo de entrenamiento con los padres suele ser eficaz porque reduce mucho la explosividad y las situaciones de violencia ya que los padres no tienen que controlar todo, sino sólo una parte de los comportamientos, aquellos importantes y peligrosos, y se tienen que esforzar en negociar las situaciones B, para llegar a soluciones realistas y mutuamente satisfactorias (Greene, 2005; Greene et al 2005, Greene, Plan B in action, http://www.livesinthebalance.org/sites/default/files/SPANISH-PAPERWORK.pdf).
El programa de Ross Greene tiene seminarios de entrenamiento presenciales y on-line de muchas horas, y parte de los materiales están traducidos al español, para su mayor facilidad de uso en la clínica.
Bibliografía Abreviada
Green RW , Biederman J, Zerwass S, Monuteaux MC, Goring JC, Faraone SV (2002). Psychiatric co-morbility, family dysfunction, and social impairement in referred youth with oppositional disorder. Am J Psychiatry. 159: 214-24.
Greene RW. (2005) The Explosive child, 3rd Edition, N York, Harper-Collins
Greene RW, Ablon JS. (2005) Treating explosive kids: The Collaborative Problem Solving Approach. New York, Guilford.
Green R . Plan B in action. Lives in the Balance Website.Plan B Cheat Seat in Spanish en http://www.livesinthebalance.org/sites/default/files/SPANISH-PAPERWORK.pdf
http://www.livesinthebalance.org/
http://incredibleyears.com/team-view/carolyn-webster-stratton/